Un traumatismo a nivel bucal o una enfermedad periodontal pueden originar la pérdida de una pieza dental. La caída de un diente es más común de lo que imaginamos, sin embargo, esto puede ser solo un mal rato y no necesariamente un espacio vacío en tu dentadura. ¿Es posible reimplantar dientes?
Si la caída del diente se produce por un golpe fuerte es importante mantener la calma y saber que es posible que un odontólogo restituya la pieza en su lugar, siempre y cuando se maneje de la forma adecuada y con rapidez.
Pero qué pasa cuando la pérdida dental es consecuencia de la enfermedad periodontal y no de un traumatismo. ¿Es posible que ese diente vuelva a ser reimplantado? Antes de contestar a esta pregunta hay que entender qué es la enfermedad periodontal.
Descarga nuestro ebook
Índice de Contenido
La enfermedad periodontal es una patología crónica, que se produce por la acumulación de bacterias y que puede conducir a la pérdida total del soporte de los dientes en las encías y el hueso.
Hay dos tipos de enfermedad periodontal: la gingivitis y la periodontitis. Cada una tiene distintos grados de severidad y una puede derivar de la otra.
La gingivitis es la fase inicial de la enfermedad periodontal. La acumulación de sarro en los dientes durante esta etapa provoca sangrado, incluso espontáneo, debido a la inflamación de las encías. Puede tratarse siempre y cuando se visite al odontólogo a tiempo.
Si padeces gingivitis y no te sometes a un tratamiento en el momento adecuado, puede derivar en una periodontitis, la etapa más grave de la enfermedad periodontal. Cuando se padece de periodontitis ya no hay vuelta atrás.
Según estadísticas publicadas en un informe de la Organización Mundial de Salud -con números levantados en 2018- la enfermedad periodontal es la undécima enfermedad más prevalente en el mundo.
La periodontitis afecta no solo los tejidos blandos que rodean el diente, si no también el hueso que lo sostiene.
Photo by Umanoide on Unsplash. Licencia cc0
En su estado más grave, en la etapa de periodontitis, las consecuencias de la enfermedad son la pérdida de las piezas dentales y del hueso de soporte dental; además del deterioro irreversible de las encías.
La pérdida de las piezas dentales no solo tiene que lamentarse desde el ámbito estético. La falta de algún diente puede modificar la forma en la que se ve tu sonrisa, pero también afecta el proceso de masticación de los alimentos y su posterior digestión.
Además, puede complicar los cuadros de salud general, especialmente el de las personas que padecen diabetes, enfermedades renales o problemas cardiovasculares; ya que como la enfermedad periodontal es causada por bacterias, las infecciones en estos pacientes crónicos promueven el avance de estas patologías.
La respuesta es no o al menos no es recomendable. Por ejemplo, la Organización Colegial de Dentistas de España, contraindica el reimplante de piezas dentales cuando el paciente sufre enfermedad periodontal.
La pérdida de encía y del hueso que sostiene los dientes en su lugar es la razón por la cual no es recomendable. En palabras sencillas, no hay forma de reinsertar el diente cuando no existe un soporte sano para que se mantenga.
Como se mencionó en el inicio de este artículo, si, en caso de que la caída de los dientes haya sido por traumatismo y que se hayan tomado las medidas necesarias para la conservación adecuada de las piezas.
La Asociación Española de Endodoncia recomienda que el proceso, desde la recuperación de la pieza hasta su conservación, se maneje con extremo cuidado. El diente debe ser tomado por su corona y no por su raíz y debe transportarse en una solución de suero salino, leche o en la propia saliva del paciente, puede mantenerlo debajo de la lengua.
De nuevo hay que tomar muy en cuenta que el traslado del paciente debe ser lo más inmediato posible, para contar con una actuación terapéutica más efectiva.
Mientras más horas transcurran entre el accidente y la visita al especialista, las probabilidades de éxito del reimplante y la revascularización pulpar, disminuyen considerablemente.
Según cifras aportadas por la Asociación Española de Endodoncia “las reinserciones dentarias con posibilidad de recuperación del periodonto se realizan de manera inmediata o al menos antes de 15-30 minutos”.
Descarga nuestro ebook
Después de la revisión de las condiciones de la pieza dental y del alveolo (cavidad donde está insertado naturalmente el diente), el odontólogo, mediante la presión digital suave, recoloca el diente.
A continuación, procede a la ferulización semirrígida del diente, junto a otros dos que no tengan daños. Esto se realiza generalmente con una resina compuesta que debe mantenerse de 7-10 días, sino hay un traumatismo grave. De presentar alguna complicación, esta ferulización puede prolongarse hasta por un mes.
El paciente debe seguir una dieta alimenticia semisólida y es recomendable el uso de antibióticos para evitar infecciones. El seguimiento clínico de la condición del diente es recomendable durante el siguiente año.
La reimplantación de dientes solo es recomendable en casos de traumatismo y solo si la pieza dental es conservada de forma adecuada mientras se acude al especialista.
La rapidez con la que se acuda al consultorio odontológico es fundamental para el éxito de la revascularización pulpar, al igual que la idoneidad del medio de transporte de la pieza dental.
Aunque el traumatismo es una de las causas más comunes de la pérdida de piezas dentales, la fase de mayor gravedad de la enfermedad periodontal – la periodontitis – también puede derivar en la caída de los dientes.
En caso de periodontitis no se recomienda en ninguna circunstancia la reimplantación de las piezas dentales, según la Organización Colegial de Dentistas de España; puesto que la enfermedad periodontal afecta la condición de las encías y los huesos en donde están incrustados naturalmente los dientes.
Si te ha gustado este artículo quizás quieras leer también:
7 señales de que sufres de periodontitis
¿Cómo los implantes dentales pueden mejorar tu calidad de vida?
¿Es posible que tu cuerpo rechace los implantes dentales?
Todo lo que necesitas saber sobre tu salud bucal